Equipo Ideal 2024 y Anti Equipo – Liga Pro
Terminó el 2024 de la liga de fútbol profesional de Ecuador. Tuvo juegos y momentos emocionantes, podríamos decir que de hecho el torneo estuvo lejos de ser aburrido, sin embargo, probablemente tuvo menos calidad que en ediciones anteriores y si se piensa en lo que puede pasar con los clubes en eventos internacionales, la perspectiva no es muy buena.
Estos son los mejores jugadores que a nuestro criterio tuvo el año en Ecuador:
David Cabezas: El portero de El Nacional estuvo semana a semana en boca de afición y prensa especializada al cumplir con actuaciones vitales para que el cuadro criollo sume valiosos puntos, aunque quizás, lo mejor de su repertorio apareció en Copa Ecuador. Liderazgo, buen timing y reflejos. Se habló de que se le de una oportunidad en la selección mas la misma no llegó. Prácticamente es un hecho que su carrera continúe en el exterior.
Mateo Carabajal: Hay que anotar que Independiente del Valle entre otros méritos tuvo la mejor defensa del año y el zaguero argentino fue el de presencia más regular en ese bloque que durante buen tramo del año era garantía de seguridad para su club. El remate de su temporada no fue el mejor así como de todo su club.
Ricardo Adé: Es el tercer año consecutivo que el zaguero haitiano está considerado en nuestra lista. Su presencia siempre significará tranquilidad para Liga Deportiva Universitaria sobretodo en los juegos cuya dificultad y trascendencia merecían una especial atención en defensa. Al momento es uno de los líderes del equipo y tranquilamente uno de los mejores jugadores de los torneos ecuatorianos de los últimos tiempo.
Yaimar Medina: Una de las revelaciones de este año. Como ya viene siendo costumbre, Independiente del Valle presenta desde sus canteras el futuro del fútbol ecuatoriano, así fue el caso de “moto”, sobrenombre claramente inferido por las veloces incursiones que este futbolista es capaz de realizar desde el costado izquierdo y por sus virtudes puede ocuparse de labores ofensivas y defensivas. También tiene un importante don para ejecutar tiros libres.
Ezequiel Piovi: El Capitán de Liga Deportiva Universitaria repite presencia en el once ideal así como la “U” repitió título en esta temporada. Las presentaciones en este caso sobran, ha demostrado absoluto liderazgo, siendo el alma del conjunto capitalino. Su dominio de la media cancha dicta condiciones en el partido, sale jugando con claridad y también es muy bravo cuando el momento lo requiere. Así mismo se va inscribiendo en la historia de los torneos ecuatorianos.
Fernando Cornejo: El volante chileno de Liga no tuvo el mejor arranque a su llegada al cuadro albo, pero poco a poco se ganó la consideración del público siendo el complemento ideal para Piovi en el mediocampo jugando con mucho despliegue y garra. Aquella enjundia que a veces es necesaria para sacar partidos bravos adelante. Claro, también adicionando técnica.
Janner Corozo: Barcelona SC tuvo un año agridulce y entre los vaivenes de la temporada encontró en este futbolista su bastión de regularidad. La mejor arma ofensiva de El Ídolo en muchas vías: ya sea conduciendo el ataque, asistiendo y claro, marcando goles que valieron puntos y al menos una clasificación a fases iniciales de Libertadores al club guayaquileño.
Diego Armas: Es una aparición extraña en esta lista, pues su equipo ni siquiera alcanzó puestos en torneos internacionales, pero fue el alma de un Técnico Universitario que remó de atrás para buscar algo de protagonismo en las últimas fechas, pasando por sus pies casi todo el fútbol del rodillo, además de haber sido el futbolista ecuatoriano que más goles anotó en el año. Dentro de algunas temporadas destacables, sin duda esta fue la mejor de su carrera.
Keny Arroyo: Otra de las revelaciones de Independiente del Valle. Fue encargado especialmente en el segundo semestre de resolver partidos o ayudar a hacerlo. Su gambeta por derecha y su olfato goleador le han hecho incluso ganarse un puesto en las convocatorias a selección ecuatoriana a sus 18 años. Su juventud en teoría es un buen augurio para su carrera perfilándose como una de las promesas del balompié tricolor.
Álex Arce: Indiscutiblemente el mejor jugador de la temporada. Sus 28 goles son los suficientemente contundentes para certificarlo y es la mejor cifra desde que se implementó el actual formato de torneo. Llegó al fútbol ecuatoriano sin mayor cartel y en breve se convirtió en la temible carta goleadora de Liga Deportiva Universitaria con una certeza implacable. De formidable cabezazo, incontenible en el contragolpe y muy oportuno a la hora de aparecer en el área. Muchos de sus tantos fueron útiles para sumar puntos y es la principal razón del nuevo título del conjunto de la Casona.
Bryan Ramírez: El jugador revelación por excelencia. En su segundo año en Liga de Quito ha sabido ganarse la titularidad cuando los llamados a estar en su puesto deberían ser foráneos o gente de mayor experiencia. Perfilado más bien hacia los costados, cada incursión suya eran permanentes dolores de cabeza para el rival. Fue un excelente iniciador de jugadas ofensivas, gran asistidor y desgastador de defensas contrarias. Un nombre que salió en teoría de la nada y terminó siendo muy valioso.
Entonces el equipo del año quedó así:
David Cabezas; Mateo Carabajal, Ricardo Adé, Yaimar Medina; Ezequiel Piovi, Fernando Cornejo, Janner Corozo, Diego Armas; Keny Arroyo, Álex Arce, Bryan Ramírez
MVP: Álex Arce
DT: Pablo “Vitamina” Sánchez: El estratega argentino tomó un plantel de Liga Deportiva Universitaria que arrastraba muchas interrogantes y logró hacerlo funcionar con precisión, tal vez sin demasiada espectacularidad, pero ganando los puntos que se requirió para lograr el bicampeonato sin mayores discusiones.
Once alternativo: Guido Villar; José Quintero, Richard Mina, Jonnathan Mina; Angelo Mina, Gabriel Cortez, Erick Plúas, Mathías Acuña; Jeison Medina, Pablo Magnín, José Fajardo
Anti 11:
Gilmar Napa: No corrió con mayor fortuna cuando tuvo la oportunidad de reemplazar a Ortiz en el arco de Emelec y cometió varios errores que costaron partidos que construyeron la calamitosa campaña del bombillo en la segunda etapa.
Guillermo Coronel: hay que poner a algún defensa del equipo que recibió 60 goles en el año, que fue Imbabura.
Edilson Cabeza: misma razón que su compañero de Imbabura.
David Ortiz: defensa de Cumbayá. Estuvo presente y tuvo que salir en la peor goleada que se vio en el fútbol ecuatoriano como el 8-1 que Barcelona le propinó al elenco norteño.
Fernando Gaibor: Una nueva oportunidad para que este volante demuestre lo que le llevó incluso a jugar en grandes equipos en el exterior que dejó pasar, esta vistiendo la camiseta de Barcelona. Desempeño bastante irregular con más malas que buenas.
Cristian Erbes: El volante argentino de Emelec fue disminuyendo su nivel, tanto así que perdió espacio en un equipo que terminó repleto de problemas.
Andrés Ricaurte: el colombiano llegó a Emelec como el llamado a administrar el jeugo del bombillo, pero normalmente sus actuaciones estuvieron por debajo de lo esperado.
Kendry Páez: Al joven talento tricolor lo ponemos en esta lista a maneras de jalón de orejas (?) dado el notorio declive en su rendimiento observado en el segundo semestre del año, lo que ocasiona preocupación y rumores de falta de disciplina en su carrera. Se espera mucho más de él y esperamos nunca más verlo de este lado del año.
Eduard Bello: El cartel de este ofensivo venezolano hacía esperar mucho más de lo que finalmente rindió en Barcelona que fue a cuenta gotas.
Romario Ibarra: Fue una de las grandes apuestas de Independiente del Valle para conseguir algún título, pero rara vez marcó diferencia y de hecho fue perdiendo espacio a medida que transcurrió la temporada.
Washington Corozo: Llegó a Emelec como carta de gol, pero estuvo lejos de lo mismo y su andar de hecho fue bastante errático. Temporada olvidable.
Guitarras y gol