Análisis de Fin de la Segunda Etapa
Concluyó la segunda etapa del Torneo Ecuatoriano de Fútbol. Si bien, podríamos decir que es un despropósito que 8 de 12 equipos salgan de alguna forma premiados (¡incluso una de Serie B!), la verdad es que de alguna forma revalorizó el torneo ya que todos los clubes, salvo los descendidos, en algún momento del año tomaron protagonismo y aportaron con algunos jugadores para apreciar el año. Ha sido un agradable torneo el 2017 a pesar que los problemas organizativos han estado por empañar el desenlace.
Emelec nítidamente fue el mejor de la segunda etapa y las razones para ganarla estuvieron en la recomposición de su sector derecho, donde más problemas tuvo a principio de temporada. Con la llegada de Juan Carlos Paredes y Fernando Luna se reforzó dicho costado, más el gran año de gente como: Fernando Gaibor, Osbaldo Lastra, Ayrton Preciado y Brayan Angulo, además de la recuperación de Jorge Guagua de su lesión colaboraron para la estructura sólida de un equipo que luce como favorito para ganar el torneo.
Emelec fue el cuadro que más victorias consiguió en la temporad regular: 23
Figura: Ayrton Preciado
El Nacional pasó de candidato al descenso a candidato al título. Hacia el remate de campeonato los criollos exhibieron un fútbol no solo efectivo sino vistoso. Del medio hacia arriba, jugadores como: Roberto Garcés, Jonathan Borja, Manuel Balda, Adolfo Muñoz y Alejandro Villalva, sumados al buen momento goleador de Bryan De Jesús y Miguel Parrales, ayudados también en el arco por Johan Padilla quien tuvo una gran temporada, hicieron soñar a la hinchada roja y generaron aplausos en los rivales. Lastimosamente el pésimo arranque de temporada evitó que llegue más lejos.
El Nacional fue el cuadro más goleador de la temporada con 73 tantos a favor
Figura: Manuel Balda
Se puede calificar como histórica la temporada de Macará que ha llevado a este tradicional club ambateño a la disputa de su primera Copa Libertadores. El celeste pudo llegar hasta acá gracias al implacable poder goleador de Juan Manuel Tévez, quien estuvo siempre bien asistido por: Carlos Feraud, Ronald Champang o Armando Gómez, teniendo un eficiente medio centro como Carlos Arboleda. Tal vez el mayor problema de los ambateños fue el no ser del todo constantes con su campaña, perdiendo puntos clave que podrían haberlos llevado incluso más lejos
Figura: Juan M. Tévez
Delfín dio batalla en la etapa hasta donde pudo. Después de un espectacular primer semestre, en buena parte de la segunda estuvo manteniendo el primer lugar ante la presión de a Emelec, Cuenca, Independiente o Nacional, turnándose por sacarlos de la cima, cosa que finalmente consiguieron los azules. El plantel relativamente corto de los manabitas se vio afectado por lesiones y convocatorias a selecciones, lo que los dejó lejos de lograr el título sin necesidad de final. La ausencia en varios pasajes de sus figuras como: Roberto Ordóñez, Carlos Garcés, Jhon Chancellor y una disminución del rendimiento de Jacob Murillo incidieron.
Delfín tuvo la portería menos vencida del torneo con 34 goles en contra.
Figura: Roberto Ordóñez
La campaña de Liga Deportiva Universitaria volvió a ser frustrante, aunque al menos se alejó decisivamente de puestos de descenso que eran muy preocupantes. Tras la llegada de Pablo Repetto a la dirección técnica, más la incorporación de Aníbal Chalá, Lucas Tagliapietra y Sherman Cárdenas, se pretendía recuperar el camino perdido y brevemente se ilusionó con algo más, pero no fueron mayormente los refuerzos esperados. A una campaña poco grata la salvó el olfato goleador de Juan Luis Anangonó, pero sobretodo de Hernán Barcos, quien prácticamente será ungido como el goleador de la temporada. Aún está en disputa su entrada a Copa Sudamericana.
Figura: Hernán Barcos
Una vez más, la oportunidad de Independiente del Valle de buscar el título se esfumó. A pesar de los goles de Michael Estrada y Maximiliano Barreiro, además del buen fútbol de Efrén Mera y Billy Arce, por momentos pareció que el club de Sangolquí careció de “hambre de gloria” y perdió puntos increíbles, además que trascendió la indisciplina de Gabriel Cortez. Tras no poder cumplir un mayor objetivo, Alexis Mendoza prefirió no continuar en un club que de todas formas y paradójicamente, no deja de ser regular, lo que le llevará a jugar Copa Libertadores por quinto año seguido.
Figura: Billy Arce
Barcelona pagó un alto precio por su brillante participación en Copa Libertadores en momentos en los que inevitablemente tuvo que optar por no jugar el torneo local con varias de sus figuras a lo que también se sumó el agotamiento físico y que jugadores como Damián Díaz o Ely Esterilla no tuvieron su mejor año. Interesante la consolidación en la zaga de Xavier Arreaga, notable temporada de Máximo Banguera y los goles de Jonatan Alvez siempre estuvieron ahí, a pesar que estuvo complicado por su comportamiento a veces díscolo. Finalmente los 6 puntos descontados a la tabla acumulada lo marginaron de la Libertadores a costa de Macará en el último juego, lo que fue un fin de temporada poco grato y la clasificación a Sudamericana tal vez sabe a poco.
Figura: Jonatan Alvez
Deportivo Cuenca por momentos dio la impresión de poder incluso entrar a la disputa del título nacional, pero luego de las derrotas en la fecha espejo con Emelec, el rendimiento del equipo morlaco se vino abajo con sucesivas derrotas que le quitaron sus aspiraciones de campeonato, quedándose tan solo con un cupo a Copa Sudamericana. Fue brillante el concurso del goleador argentino Juan Ignacio Dinenno, así como de sus compatriotas Gabriel Schunke y Brian Cucco en el centro de la zaga azuaya. Un buen año también para el enganche Jonny Uchuari.
Figura: Juan Dinenno
Guayaquil City apenas pudo conseguir 4 victorias con su nueva denominación y tuvo problemas con la conformación de un buen 11 en el que el veterano Walter Ayoví era el llamado a ser figura. Fue interesante el concurso de Diego Dorregaray y Martín Alaniz, pero de rendimiento irregular ambos. También fue notable la recuperación de Anderson Naula. Los problemas con la cancha sintética del Chucho Benítez incidieron con una campaña de no tan grata recordación. Tal vez en un momento de la etapa anterior, aún como River Ecuador, esbozó momentos de buen fútbol, mas estuvo de todas formas lejos de acceder a alguna competición internacional.
Figura: Diego Dorregaray
Fue triste lo ocurrido en esta temporada en Universidad Católica. Los camarattas arrancaron exhibiendo espectáculo y calidad, pero en el camino las lesiones y suspensiones afectaron tal vez demasiado a este plantel, sumado a conatos de indisciplina de su goleador, John Cifuente y la salida al exterior de Robert Arboleda. Los extranjeros en el medio campo, Matías Defederico y Gastón Gil Romero aportaron con clase y calidad al equipo, mientras que el talento nacional, aquejado también de dolencias, fue demasiado irregular, tanto que la chatolei terminó jugando con un plantel rejuvenecido.
Figura: Matías Defederico
En su único año en primera división, Clan Juvenil soportó serios problemas administrativos que le significaron jugar una primera etapa clamorosamente mala. Sin embargo, en la segunda consiguieron esbozar un 11 ideal y bajo la dirección de los Asad complicaron a unos cuantos, además de hacer una campaña algo más digna que el desastre inicial. Aunque claro, estuvo lejos de alcanzarse para intentar pensar en quedarse en Serie A.
A Clan Juvenil le anotaron 102 goles en el año, siendo la valla más batida.
Figura: Luis Congo
Fuerza Amarilla fue sumiéndose en el desastre. Continuos cambios en la dirección técnica y administrativa, penurias económicas y organizativas lograron que este equipo finalmente se caiga a pedazos y tenga un fin de campaña fatal. Con todas las urgencias acumuladas se ve difícil que en algún momento puedan volver a Serie A y Machala de nuevo se queda sin fútbol de primera división.
Figura: Wagner Valencia
Guitarras y gol