La Polémica de los Rayos UV

La gran polémica del fútbol ecuatoriano del fin de semana no la ocasionó un resultado en particular de una fecha que de hecho fue pródiga en goles y emociones, sino por una pancarta que agitó sentimientos y puntos de vista. Barcelona, en ánimo en teoría de dar un mensaje a favor de la salud, desplegó una pancarta desaprobando jugar a mediodía por la extrema radiación solar previo al juego programado a esa hora en Quito vs El Nacional cuyo resultado final fue 3-3 y resultó un juego muy agradable.

¿A qué obedece esta atención a dicho fenómeno climático? A que recientemente fueron noticia los reportes del INAMHI que destacaban la peligrosidad de la radiación UV que se estaba concentrando en Quito y ciudades de la Sierra tanto a finales de septiembre como la semana pasada, marcando indicadores de 17 o 19, cuando se ha normado que pasado el 11 es peligroso para la salud si la persona se expone al sol sin la debida protección. La última alerta estuvo vigente hasta el 20 de octubre, 2 días antes del juego.

Partiendo de dicha pancarta, dirigencia y jugadores de Barcelona, apoyados por su hinchada y prensa radicada en la Costa han insistido en la búsqueda de evitar que se programen juegos en Quito y ciudades de altura en horarios meridianos. Del lado serrano esto se interpretó como un intento de restringir las costumbres del fútbol especialmente capitalino y, cierto es, de restarle cierta ventaja que puede darles a los cuadros serranos jugar con ciertas condiciones climáticas. Con ello, los debates se instalaron, los cruces de opiniones descalificadoras que rayaron en el fanatismo y regionalismo fueron la orden del día.

El argumento quiteño es la costumbre: en Quito se ha jugado desde siempre temprano. Si se remonta a los orígenes y épocas antiguas del fútbol capitalino, este siempre se desarrolló en la mañana hacia el mediodía, recuerden los famosos dobletes y tripletes de décadas pasadas. La razón de esta costumbre es el clima, pues el frío y la lluvia han hecho que desde tiempos de Sebastián de Benalcázar (?) las actividades recreativas en la ciudad se hagan temprano para aprovechar los momentos en que el clima es “bondadoso”. La lluvia ha sido un factor preponderante para esto, acordémonos que incluso la jornada inaugural del Estadio Atahualpa se suspendió por lluvia. Ahora con técnicas modernas es difícil que dicha cancha se vea afectada por el clima, mas es molesto para el espectador y en general, la costumbre del quiteño siempre ha sido levantarse y dormir temprano.

¿Cómo así nos quieren quitar nuestras costumbres? Se dirá desde Quito, ¡Si toda la vida se ha jugado así y no sea muerto nadie! Habrá que pensar primeramente que la preocupación por la radiación UV es reciente en nuestro medio. Esta publicación de Diario El Comercio (clic aquí) señala estudios al respecto del 2015, los que no precisamente causaron el revuelo de los últimos días. Cierto es, con un mejor manejo de las comunicaciones y redes sociales, la ciudadanía pudo estar mejor alertada del problema y tomar sus respectivas previsiones. Ante el efecto de la radiación UV no hay alguna política clara en el Ecuador.

¿Por qué el énfasis en las sedes de la Sierra? Según este estudio (clic aquí) los factores que influyen en la radiación UV son: latitud y fecha, altitud, niveles de ozono, nubes y contaminación. Entonces, según todo eso, Quito apunta a todas aquellas condiciones, pues está en pleno paralelo cero, además que recientemente pasó un equinoccio, lo que hace que el sol esté en lo más alto del cielo, sus bien sabidos 2850 metros de altura agravan el tema e inusualmente la ciudad ha “gozado” de cielos despejados en estas épocas del año que suelen ser lluviosas. El problema con los índices de ozono y contaminación son de afectación reciente, conciernen al planeta entero y Quito no se queda atrás, haciendo esa imagen mental de amaneceres con una tenebrosa capa de smog, se toma en cuenta que es un factor que no siempre estuvo presente y es propio de tiempos modernos.

Con todo ello y ante la problemática mundial de un evidente cambio de clima, sea este fruto de la actividad humana o no, eso corresponde a otra polémica, sería necesario “alterar costumbres”, pues la exposición prolongada a los dichosos rayos UV afectaría no solo a deportistas, sino a espectadores, árbitros, periodistas y todos quienes estén involucrados en el desarrollo de un juego de fútbol. Si está es la intención, Barcelona Sporting Club sería un adalid de la salud y un ejemplo para la actividad.

¿Qué dice la OMS al respecto? Estas son las recomendaciones (clic aquí) que incluyen: uso de bloqueador solar, lentes oscuros, ropa clara que cubra todo el cuerpo y una fundamental que es el especial cuidado a los niños ante estos riesgos. Siendo esto así, ¿cómo es posible que en el país entero se juegue los torneos de divisiones menores a horarios meridianos y nadie proteste por ello? Un integral cuidado del deportista debería justamente empezar por su formación. Cosa que lastimosamente en Ecuador no suele ser bien cuidada y ojo que es TODO el Ecuador el que queda en una zona tórrida propensa a ser afectada por la intensa radiación solar.

El tema de la radiación UV es de preocupación mundial, se sabe que la continua exposición a la misma puede llevar a problemas como melanoma (cáncer de piel) o cataratas (pérdida de visión). Si Barcelona lleva bien esta iniciativa sería un verdadero golazo de su institución, pero para ello, se necesita más que exhibir un cartel, sino establecer consensos y criterios técnicos con el Ministerio de Salud Pública, INAMHI y si es posible la OMS. De esta manera, su preocupación será creíble y sobretodo efectiva llegando a los albores de lo ejemplar. Lo otro quedaría como el aprovechar una coyuntura para quitar una ventaja deportiva a un rival.

Hablando de dicha ventaja, si se especula que en Quito se juega a mediodía por aprovechar la ventaja atmosférica, se explicó el aspecto costumbres párrafos arriba. Puede ser que en los últimos años se haya acentuado esta creencia, pero siempre es bueno recordar que un equipo bueno gana en cualquier condición. Sino pregúntele como hizo Barcelona en 1989 o 1995 para quedar campeón en Quito a mediodía o a Emelec de 1988 o 2015. Con todo, esperemos que en serio toda esta bulla haya sido en aras de la salud de los ecuatorianos.

4 comentarios
  1. CLAUDIO EGUIGUREN
    CLAUDIO EGUIGUREN Dice:

    Sería bueno creer en la preocupación de BSC, lamentablemente un día después del cartel BSC mismo programó un partido de sus inferiores y reservas a medio día con una radiación UV de 11

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  2. José Salazar
    José Salazar Dice:

    Nos les creo ni un poquito las buenas intenciones y la preocupación por la salud de la ciudadanía. En realidad, los equipos costeños siempre han intentado restringir el fútbol en Quito. Recuerdo las primeras ovaciones cuando en Argentina se quejaban de la altura de Quito, algunos periodistas y dirigentes de Guayaquil tomaron como suyos esos reclamos y empezaron a hablar de los peligros de jugar en la altura. En mi opinión, la pancarta fue simplemente una movida política.
    Por otro lado, la radiación uv es una preocupación justa y se debería tomar medidas. Al respecto, el gobierno debe montar una red de monitoreo a nivel nacional para medir la incidencia de la radiación uv. En otras medidas, reducir el costos a los productos de protección solar o campañas informativas podrían causar impacto positivo en la población y mejorar el problema.

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  3. kross2380
    kross2380 Dice:

    Se debe analizar la posibilidad de jugar en horas menos extremas no solo de radiación en la altura o en la costa sino por ejemplo cuando la humedad rebasa los límites q puedan ser considerados como tolerables.

    Responder

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