Liga Pro 2021: Análisis de Fin de Temporada
Culminó un año en el que se buscó normalizar la competición en cuanto a calendarios y presencia de público. En cuanto al desarrollo de la Liga Pro, su desenlace fue emocionante y como siempre, hubo sorpresas y decepciones. Vamos a dar un vistazo equipo por equipo.
Independiente del Valle se consagró por primera vez como campeón del Ecuador. Título sin duda merecido, especialmente por lo realizado en la segunda etapa. El cuadro negriazul para ese semestre se reforzó con quien venía siendo el goleador del torneo, Jonatan Bauman, además de elementos de experiencia como Mateo Carabajal en defensa y los nacionales Fernando Gaibor y Junior Sornoza. Una impecable defensa que solo recibió 27 goles, con un gran año de Richard Schunke y Luis Segovia, más Moisés Ramírez en el arco. Mientras José Hurtado por el costado derecho fue creciendo en confianza. Este fue el año en la media de Lorenzo Faravelli, gran complemento para el veterano Pellerano logrando un juego preciso y por momentos atildado. También fue el mejor local sumando 36 puntos en esa condición, tomando en cuenta que desde marzo juega en su propio escenario, el Estadio “Banco Guayaquil”.
Figura: Jonatan Bauman
Emelec finalizó el año como subcampeón. Había ganado la primera etapa y si bien no fue el cuadro con el juego más vistoso, al bombillo este año no le faltó voluntad y por ello ganó varios puntos en los últimos minutos. Es el equipo más goleador del torneo (59 tantos a favor) aunque sus delanteros tuvieron un año irregular. Más bien su gran estrella fue Joao J. Rojas, quien siendo un media punta, aportó con goles y asistencias al juego. Fue un gran año desde el sector derecho para Bryan Carabalí y Romario Caicedo. También la mancuerna en el medio campo entre Dixon Arroyo y Sebastián Rodríguez fue el respaldo del equipo, mientras José Cevallos E. resolvía varios partidos entrando al cambio.
Figura: Joao J. Rojas
Universidad Católica volverá a disputar Copa Libertadores y de hecho ha logrado su mejor posición en el torneo de Primera División desde que retornó a la misma. Los camarattas fueron los mejores visitantes de la temporada, pues sumaron 33 puntos fuera del Estadio Atahualpa, aunque como locales sufrieron un poco. También el elenco santo tuvo que sobreponerse a la enfermedad de su DT Santiago Escobar, quien además terminó renunciando faltando pocas fechas para finalizar el campeonato. La figura de Hernán Galíndez en el arco fue clave no solo para evitar encajar goles, sino que se convirtió en un liderazgo incuestionable e incluso fue llevado a selección ecuatoriana. También fue buen año para Andrés López jugando desde el costado derecho y Kevin Minda se fue asentando como un volante de contención junto a Willian Cevallos. Mientras la clave para su buen ataque estuvo en Lisandro Alzugaray.
Figura: Hernán Galíndez
Hay sentimientos encontrados acerca de lo acontecido con la campaña de Barcelona, puesto que el cuarto lugar sabe a poco por las expectativas levantadas, pero a nivel internacional alcanzaron una nada despreciable instancia semifinal en Copa Libertadores. En el torneo local la mayoría de sus figuras fueron notoriamente cayendo en su rendimiento y en la segunda etapa fue perdiendo partidos y puntos increíbles que lo alejaron de la disputa del título. Tal vez los puntos que sostuvieron la campaña y que al final permitirán a los amarillos jugar Libertadores fueron: Byron Castillo y Fernando León en defensa, más Gonzalo Mastriani en el ataque.
Figura: Byron Castillo
La gran revelación del año sin duda fue 9 de Octubre. Este equipo se perfilaba a inicios de año a intentar permanecer en la categoría y finalizó el mismo clasificando a Copa Sudamericana. Al final del año logró las mismas victorias (15) que Católica o Barcelona. En el ataque la tripleta conformada por Danny Cabezas, Danny Luna y el panameño José Fajardo causó zozobra en varias canchas del país. Lo mismo la media con Renny Jaramillo y José L. Cazares hizo a este equipo muy difícil de descifrar y vale la pena rescatar el orden que imprimió el DT ecuatoriano Juan Carlos León.
Figura: José Fajardo
Este ha sido un año decepcionante para Liga Deportiva Universitaria. El sexto lugar y el cupo a Sudamericana saben a poco para las expectativas generadas por su plantel. A mediados de año se reemplazó a Repetto por Pablo Marini a quien le costó algunos partidos imponer su idea de juego y cuando lo hizo tal vez ya era un poco tarde. A Liga no le salió bien la contratación de jugadores extranjeros que en su mayoría no estuvieron a la altura pero la buena noticia para los albos ha sido la aparición de jóvenes figuras como Djorkaeff Reasco o Nilson Angulo. De hecho, sus divisiones menores se han consagrado campeonas este año y será algo a tomar en cuenta.
Figura: Djorkaeff Reasco
Mushuc Runa cumplió una campaña sensacional y con su séptimo lugar se anotó a jugar la Copa Sudamericana. De hecho, en el primer semestre incluso el ponchito estuvo peleando por el liderato y tal vez sufrieron la salida de Bauman. Sin embargo, su columna vertebral de elementos extranjeros: Ricardo Adé, Gonzalo Jara, Jacobo Kouffati y Santiago Giordana sostuvo su campaña interesante, además de nacionales como el portero Adonis Pabón y el atacante Bágner Delgado. Habrá también que destacar a un técnico ecuatoriano como Giovanni Cumbicus. Les fue mejor de visitante que de local, condición que no siempre pudieron ejercer en su cancha de Echaleche.
Figura: Bágner Delgado
Delfín pasó por un año algo irregular finalizando con 10 triunfos, 10 empates y 10 derrotas, pero tuvo un interesante sprint que les permitió conseguir el último lugar para Copa Sudamericana. El cetáceo no se hizo fuerte en Manta y de hecho fue un poco mejor visitante. La llegada del DT Horacio Montemurro permitió que los manabitas sobretodo se revitalicen en ataque, donde no solo se destaca el poder goleador de Jhon Cifuente, quien quedó segundo en la tabal de artilleros del torneo, sino que estuvo permanentemente bien asistido por Joao Ortiz y Janner Corozo, lo que les valió incluso ser llamados a la selección.
Figura: Jhon Cifuente
Otro club decididamente decepcionante fue Aucas que en la última fecha se quedó sin participaciones internacionales cuando apuntaban a lograr su primera vez en Libertadores. El cuadro oriental increíblemente cayó ante: Cuenca, Macará y Guayaquil City en las últimas fechas y echó a parder un año que de todas maneras había sido irregular. Los goles de Francisco Fydriszewski, el juego de Gonzalo Verón y la defensa de: Fontanini, Mina y Pizzorno no fue suficiente para coronar el año y el equipo oriental tendrá que replantear un par de cosas para no volver a sabotearse, porque al menos había hecho complicada la vida a los poderosos.
Figura: Francisco Fydriszewski
Tras varios años de participaciones internacionales, Macará esta vez se quedó sin premios con una campaña que nunca logró despegar y de hecho poco a poco se fue desinflando pese al cambio de DT de Favaro hacia Paúl Vélez. El celeste especialmente tuvo problemas defensivos con una baja de rendimiento de sus defensas extranjeros y a pesar de contar con un mediocampo interesante con Roberto Garcés y Matías Duffard, lucieron generalmente desbalanceados. Una buena noticia fue la aparición de Arón Rodríguez como un interesante atacante.
Figura: Arón Rodríguez
Con varios problemas administrativos, Técnico Universitario se las ingenió para no pasara mayores apuros de cara a la permanencia en la categoría y nuevamente el DT “Cheché” Hernández sacó agua de las piedras. Fue fundamental para el rodillo rojo terminar el año con la mejor defensa del torneo, pues solo encajaron 26 tantos en contra, aunque sus 24 a favor hablan de un ataque muy endeble. Pero hablando estrictamente de la defensa, fue un gran año para Eddie Guevaram así como para el portero Walter Chávez. El 2022 será complicado para los ambateños.
Figura: Eddie Guevara
Deportivo Cuenca apeló a la supervivencia y digamos que lo logró. Se podría decir que el cuadro morlaco tampoco tenia un plantel tan modesto, pero las continuas voces de problemas administrativos a veces parecían reflejarse en la cancha. Fue el peor visitante, en este año nunca ganó en esa condición y apenas alcanzó 5 empates. Diego Dorregaray aportó su poder goleador cuando pudo y la confirmación como titular de Denilson Bolaños fue también importante. Es otro club que en el próximo año tendrá que encarar varias preocupaciones.
Figura: Diego Dorregaray
Orense finalizó el año en décimo tercer puesto y con 31 puntos. Parecería poco pero el elenco de Machala hizo varias presentaciones interesantes y puede ser que le pesó la falta de eficacia para anotar goles. En su alineación hubo varios elementos interesantes, desde la experiencia de Gabriel Achilier comandando la zaga, los extranjeros Assis y Czornozmaz, los goles de Edson Montaño y asistencias de Uchuary y Wilmer Godoy. Este plantel tiene el respaldo de un buen trabajo en divisiones formativas que se verá en las próximas temporadas.
Figura: Gabriel Achilier
Guayaquil City volvió a tener otra temporada olvidable, terminando la misma en puesto 14 y sufriendo por un posible descenso hasta la última fecha. El cuadro ciudadano estuvo repleto de problemas defensivos y encajó 48 tantos y de hecho, de no ser por el portero Máximo Banguera, bien podría haberla pasado peor en portería propia. Por el lado ofensivo, Miguel Parrales, Marcos Caicedo y Renato César fueron de lo mejor en un equipo que preció al último interesarse por seguir en Serie A. Su futuro es una incógnita, pues no se le conoce problemas administrativos.
Figura: Miguel Parrales
Manta FC lamentablemente se va por donde vino. El atunero sobretodo tuvo una segunda etapa bastante mala y así fue acercándose hacia el descenso que finalmente se concretó. Tuvieron una campaña como locales bastante pobre y generalmente les costó sostener resultados aunque tal vez su juego no era del todo malo. Pero a pesar de contar con la mancuerna entre Roberto Ordóñez y Martín Alaniz, este equipo manabita no pudo sostenerse y volverá a jugar en Serie B, donde tendrá que reorganizarse.
Figura: Roberto Ordóñez
Lo de Olmedo en el 2021 es una de las campañas más desastrosas que se han visto en el fútbol ecuatoriano de primera división. Se sabía que el ciclón andino iba a tener momentos muy complicados administrativamente hablando. Antes de finalizar la primera etapa el equipo sufrió un éxodo considerable que los llevó a tan solo sumar un punto en toda la segunda etapa. Números terribles por los que fueron: peor equipo local (5 puntos), peor ataque (22 goles favor) y una pavorosa cifra de 76 goles en contra, la que de hecho fue atenuada por la intervención del portero José Gabriel Cevallos.
Figura: José G. Cevallos
Guitarras y gol