La Apuesta Hacia la Oscuridad
A su tiempo fue descrito como un “suicidio comercial”, pero también es considerado el disco que selló el amor incondicional de la fanaticada de The Cure hacia la banda inglesa. “Disintegration” cumplió 30 años de haber sido publicado el pasado 2 de mayo y en honor a eso haremos una acostumbrada revisión.
“Disintegration” podría considerarse como un cíclico retorno dentro de la discografía de los británicos, tras haber abandonado el sonido oscuro y monótono de inicios de los 80, haberse reagrupado y logrado el éxito mundial con un pop pegadizo y apto para todo público. Pero este disco estaría lejos de continuar la dulce melancolía de “The Head on the Door” o “Kiss Me…” y más bien tomaría un rumbo más sombrío acompañado por la sensación de envejecimiento que recorría a su líder, Robert Smith.
La preocupación a la interna de su casa disquera se fundaba en las largas introducciones instrumentales de varios de los temas que iban tomando forma durante las sesiones de grabación a finales de 1988 y comienzos de 1989. Cuando el disco arranca con “Plainsong”, la sobriedad de los arreglos son más bien dignos de soundtrack de película. La demora para que Smith entre a cantar da otro añadido dramático y mientras tanto, se podría decir que el álbum es sumamente cinemático.
“Disintegration” tiene varias historias. El primer sencillo es una historia de terror. “Lullaby” escenifica una pesadilla tanto en sus letras (And there is nothing I can do, when I realize with fright that the Spiderman is having me for dinner tonight), como por su tenebroso pero brillante videoclip, aunque también se puede interpretar como una sensación de acoso. El bajo y la batería son sumamente puntuales y precisos para dar ese ambiente de solemnidad y persecución y sobre los mismos descansan guitarras, teclados, vientos y toda la sofisticada orquestación que va encima de un ritmo mayormente taciturno. Para la primavera de 1989 estuvo disponible el sencillo preparando la salida a la venta del disco y alcanzando una sonada popularidad.
Casi en simultáneo y para convencer sobre esta nueva apuesta de The Cure al publico norteamericano, se lanzó como sencillo a “Fascination Street”, con un talante decididamente más duro y rockero en el que destaca sobremanera la emblemática línea de bajo de Simon Gallup, tal vez una de las más reconocibles del extenso catálogo del grupo y más el golpeteo casi marcial de la batería de Boris Williams hacen de esta ciertamente la canción más vigorosa de “Disintegration”.
Sin embargo, para un éxito total, hacía falta presentar la balada. “Lovesong” fue publicada como sencillo en verano de 1989 siendo un notable éxito a ambos lados del charco. Un tema en teoría simple, con una letra sencilla que evoca tal vez el lado más empedernido e idealizado. En cuanto a la música, una vez más el bajo es el eje vial por el que pasa todo y al que se acoplan los riffs desgarradores de guitarra de Porl Thompson y la melancolía taciturna de los teclados. Whenever I’m alone … with you…
Y para finalizar una exitosa saga de sencillos, el último promocional de “Disintegration” fue publicado en marzo de 1990. “Pictures of You” es otro de los grandes clásicos de The Cure que formaron parte del álbum. Se trata de una canción que evidentemente aborda el tema de la nostalgia fijado en un acto tan propio de la misma como el de mirar fotografías. Bien puede tomársela como el lamento de una ruptura sentimental o la partida de un ser querido. El tratamiento de las guitarras es muy especial, pues entre agudas melodías, disonantes y efectos varios dan en el clavo a la hora de lograr el ambiente casi desolador del tema.
Fue común el que se hable del retorno de The Cure a sus orígenes y se encuentra en temas como “Prayers for Rain”, “The Same Deep Water As You” o “Homesick”, la atmósfera supremamente oscura de discos como “Faith” o “Seventeen Seconds”. Así mismo, una colección de brillantes arreglos en “Las Dance” o “Untitled”, fruto de la acumulación de experiencia y de la que bien se podría calificar como la alineación más brillante de la banda com Smith – Gallup – Thompson – Williams y O’Donnell. Otras como “Closedown” o la homónima “Disintegration”. serían una ventana hacia el futuro. Los temas que no fueron tomados en cuenta como sencillos contaban con largas introducciones instrumentales generalmente.
Disintegration también fue un producto de la tensión, pues a pesar del éxito de sus placas anteriores, The Cure pasaba por una crisis fundamentada en el alcoholismo de uno de los miembros originales del grupo, Laurence “Lol” Tolhurst, que incomodaba al resto de integrantes y para su reemplazo desde las épocas del “Kiss Me…” ya estaba en los teclados Roger O’Donnell. De todas maneras Tolhurst estuvo en los créditos del disco.
Entre las distinciones que obtuvo “Disintegration”, Lullaby obtuvo el premio de mejor video en los BRIT Awards. En la cartelera de Billboard 200 alcanzó la posición 12 y vendió cerca de 3 millones de copias. The Cure comenzó a padecer los rigores del éxito masivo y la sensación de desintegración como personas, como grupo de amigos o familia y como banda de música fue casi como un karma arrastrado por el título. Ningún álbum del grupo británico volvería a tener un reconocimiento similar y pasaría por muchos cambios en sus alineaciones.
Disintegration – Fiction – 1989
1 Plainsong
2 Pictures of You
3 Closedown
4 Lovesong
5 Last Dance
6 Lullaby
7 Fascination Street
8 Prayers for Rain
9 The Same Deep Water as You
10 Disintegration
11 Homesick
12 Untitled
Guitarras y gol